El autor Morgan Housel sostiene: “me gusta la idea que los sistemas son mejor que las metas. La razón es que una vez la meta es lograda las personas tienden a parar de hacer las actividades que las llevaron a conseguir esos logros. Por ejemplo: “voy a ejercitarme todos los días” es mejor que “voy a perder 10 kilos”, una vez la persona pierde 10 kilos probablemente dejará de ejercitarse. Pasa lo mismo cuando un negocio exitoso alcanza logros importantes. La paranoia es un atributo que los novatos usan para combatir las posibilidades en contra de prosperar. Sin embargo esta actitud tiende a morir cuando el negocio alcanza los objetivos trazados.”
Por paranoia entiendo la conciencia de vivir en un mundo donde la competencia por el dinero es feroz. Olvidar esta realidad conduce a actitudes complacientes. Gastos excesivos en fiestas, viajes o salidas a comer. Las expensas en mantenimiento del carro, el apartamento o la finca son los errores mas costosos cuando la economía se aprieta. El paranoico mantiene su estilo de vida incluso en las vacas gordas porque sabe que las flacas vendrán algún día.
La idea que los sistemas superan las metas es muy poderosa. La construcción de un sistema implica un esfuerzo superior que el establecimiento de una meta. El sistema compromete a pensar y diseñar un conjunto de principios conectados entre sí. La ejecución de las actividades dentro de este conducen a generar hábitos. Por ejemplo, leer todos los días 25 páginas: en un año habrá leído 9125. Qué da para incluir: Guerra y Paz de Tolstoy, Los hermanos Karamazov de Dostoyvesky, toda la obra de García Márquez y las 4.000 páginas de Historia del declive y caída del Imperio Romano.
En Finanzas Simples, tenemos un sistema influenciado por la paranoia para la administración de nuestras finanzas personales: “Trabajar duro, gastar menos de lo ganado, e invertir la diferencia”.
The decline of paranoia that made you successful to begin with. I like the idea that systems are better than goals, because once you reach a goal you tend to stop doing the thing that made achieving the goal possible. “I’m going to work out every day” is better than “I’m going to lose 10 pounds” because once you lose 10 pounds you’ll probably stop working out. Same thing happens when a successful business or career hits a big goal. Paranoia is a trait newcomers use to combat how deeply the odds are stacked against them. But it tends to die once a goal is hit. Few things sap the paranoiac drive to do better than stable cash flow and high profit margins. Michael Moritz of Sequoia was once asked why his firm had thrived for 40 years. “We’ve always been afraid of going out of business,” was his answer. That is an exceedingly rare response in a world where most people step back, see all they’ve achieved, and assume they can breathe a sigh of relief.